Ibiza Patrimonio de la Humanidad
A lo largo de miles de años, el mar como fuente de vida, ha proporcionado tesoros escondidos en sus aguas a pescadores y navegantes. Los colores verdes y azules se entremezclan en las aguas que rodean las islas y forman el mar Mediterráneo. Descubre con nosotros lo que esconde la isla de Ibiza.
Las aguas del Mediterráneo las han compartido miles de navegantes a lo largo de la historia. La isla de Ibiza ha sido un enclave muy codiciado por las antiguas civilizaciones por su ubicación en las rutas de comercio.
Dalt Vila ciudad amurallada
Ibiza es una isla qué se identifica por la silueta inconfundible de la ciudad amurallada conocida como Dalt Vila. Miles de turistas visitan la isla cada año en busca de ocio nocturno o descanso en sus calas. Muchos de ellos ven en la silueta de Dalt Vila la forma de un gran barco que se asienta en la colina. Una silueta de un barco que ha soportado los envites de muchas civilizaciones y que da forma gracias a sus murallas y baluartes junto al campanario de su catedral.
Varias civilizaciones llegaron a la isla para conquistarla y acabaron rendidas a su gran belleza. Incluso en la época en la que la isla estaba dominada por piratas, su belleza destacaba por encima de todo.
Desde 1999 la ciudad amurallada conocida como Dalt Vila es reconocida por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad. Desde entonces la isla no ha parado de crecer culturalmente como destino turístico. Aunque la isla es conocida sobre todo en Europa como un destino turístico de fiesta y ocio nocturno, la verdad es que esconde decenas de rincones para pasar unos días de vacaciones. Playas y calas como Cala Llonga, protegidas por preciosos acantilados, son todo belleza.
Las praderas de posidonia, un tesoro bajo el mar
Las praderas de posidonia que hay bajo sus aguas son un ejemplo de la historia y biodiversidad que esconden las aguas que rodean Ibiza. La Necrópolis púnica Puig des Molins y el poblado Fenicio de Sa Caleta junto a las citadas praderas de posidonia, han sido reconocidas también por la UNESCO.
La historia y el patrimonio son dos de los grandes valores de esta ciudad, qué también da nombre a la isla. Tanto en el pasado como en el presente las aguas han sido testimonio de la llegada de gentes de todos los lugares del mundo. En la actualidad el turismo es la principal fuente de ingresos de la isla, junto a las riquezas que el mar ha traído hasta las costas y playas de Ibiza.
Sa Caleta, el poblado más antiguo de Ibiza
Los fenicios llegados de la Península Ibérica iniciaron la historia en esta bonita isla en un poblado situado en Sa Caleta, al sur de la isla, hace más de 2600 años.
Se cree que los fenicios eligieron esa ubicación para controlar las salinas cerca del poblado. Salinas que en aquella época representaban una importante fuente de ingresos. Con ellas podían realizar intercambios comerciales para obtener muchos otros productos.
A nivel arqueológico este poblado tiene un valor incalculable. Pero esto es solo una pequeña parte de todo lo que nos puede ofrecer esta isla, si decidimos pasar unas vacaciones en ella.
La gastronomía típica de Ibiza es un ejemplo de ello. Los turistas a través de las puertas de Dalt Vila pueden conocer los sabores de la isla. Diversos establecimientos y restaurantes dan de comer a cientos de turistas cada noche.
¿Tienes hambre de vacaciones? La isla te espera con los brazos abiertos.